Er hamonsito, las tapitas, una paella dominguera, el pan del pueblo o el aceite de oliva son algunas de esas cosas que suelen echar de menos los compatriotas que están lejos de casa.
Er hamonsito, las tapitas, una paella dominguera, el pan del pueblo o el aceite de oliva son algunas de esas cosas que suelen echar de menos los compatriotas que están lejos de casa.
Para hacer unas pizzas de camping te lo puedes currar un poco y preparar una masa como esta (enlace) y poner encima lo que más te guste. Pero, para esos días de capricho e indolencia, que sepas que también te puedes apañar una versión vaga con cuatro cosas del supermercado. Por el poco tiempo que lleva prepararlas y lo baratas que salen, después de comerlas seguro que, como Chus Lapreave en Amanece que no es poco, marcarás la casilla «satisfactorio».
Hacer pan al aire libre es un gran placer para los que disfrutamos de cocinar lo que comemos cuando estamos de acampada. Además de ser una actividad entretenida y gratificante, puede ser un recurso más en el catálogo de herramientas para la autosuficiencia.
Después de unos días en Asunción (Paraguay) puedo afirmar, y afirmo, que la epidemia del pan de masa madre también ha llegado hasta aquí. Además del fenómeno doméstico, en el que muchos ciudadanos se lanzaron a la aventura de hacer pan en casa durante el encierro, unos pocos valientes lo elaboran ya en sus obradores para ofrecerlo al público de su tiendas.
Toc, toc, toc.
—Jambo, I am looking for Sister Olympia.
—Me, me.
Lo que se dice llegar y besar el santo. Las hermanas franciscanas tienen tres grandes edificios de ladrillo rojo separados por varias calles de tierra del mismo color, una rotonda y unos cuantos árboles gigantescos.
En Bora Bakery, además de los problemas diarios del trabajo en la panadería, hay un gran problema añadido en cuanto a la burocracia y la legalidad. La panadería consta legalmente como parte del hotel y Michiel, como trabajador. Es la única vía posible para poder arrancar el negocio, ya que el Gobierno es muy proteccionista y no resulta fácil para el extranjero desarrollarse laboralmente, ni como empresario ni como trabajador.
Mr. Vuai está terminando de doblar, a martillazos, sobre la oxidada tapa de un diferencial, el último tornillo que servirá de anclaje de las tres cajas de madera que terminó ayer mismo y que, si el ingenio funciona, instalaremos en un momento en la moto de Michiel, dos a los lados y otra sobre la parrilla trasera.